Tenemos tiempo de ahorrar hasta octubre para poder comprar la nueva bestia de Apple, el nuevo Mac Pro que vuelve por sus fueros de hace una década.
Al verlo, no cabe duda que han querido emular al antiguo Mac Pro modular que todos hemos estado añorando durante años, pero modernizado.
Apple anuncia que el nuevo Mac Pro es mucho más modular y flexible que su predecesora, pero es un estándar bajo para comparar la ya conocida como papelera negara. Esta es una caja Apple, en su mayoría propietaria en implementación de tecnologías, con una configuración de enfriamiento personalizada que abarca todo el sistema, por lo que no será recomendable intentar integrar ampliaciones y opciones estándares de PC. Vamos, lo de siempre, Apple quiere que pases por caja para todo lo que quieras configurar y a un precio seguro que más alto que el normal en otros fabricantes. Por lo que habrá que esperar a ver qué fabricantes integran opciones bajo la tutela de Apple.
Al igual que con los módulos MPX personalizados, enfriados de forma pasiva, la fuente de alimentación también es un diseño personalizado que abarca toda la parte inferior de la carcasa, proporcionando hasta 1,4KW sin un ventilador específico dedicado. Hay varios sistemas de entrada de aire en el frontal lateral y un sistema para extraer el calor al exterior que serán los responsables de enfriar todo el sistema, todo pensado para que solo se pueda ampliar con accesorios propietarios de Apple y una pesadilla para integrar otros elementos que no sean Apple o de los que Apple se lleve su tajada.
Los usuarios de Mac Pro tendrán que confiar en que Apple actualice y amplíe su gama de módulos MPX para cuando quieran una actualización de gráficos, y que las opciones de almacenamiento alcancen un máximo de 4 TB.
El subsistema de gráficos del Mac Pro afirma ser la "arquitectura gráfica más poderosa del mundo". Sin duda, tiene cifras impresionantes, con las nuevas tarjetas AMD Radeon Pro Vega II que ofrecen hasta 14 teraflops de rendimiento asociada a 32 GB de memoria con 1TBps de ancho de banda. Actualizándose al Radeon Pro Vega II Duo para obtener dos GPU por tarjeta, para obtener un total de cuatro GPU con 128 GB de memoria de alto ancho de banda dentro de ese marco de metal. Todo esto se logra con los nuevos módulos de expansión MPX a medida de Apple, que utilizan una combinación de PCI Express y Thunderbolt 3 para dar más potencia y ancho de banda a las tarjetas de AMD. No sabremos hasta pasado el año completo si los fabricantes harán módulos compatibles para estas ampliaciones.
Con estas ampliaciones el Mac Pro podrá manejar hasta seis pantallas de 6K, lo que equivaldría a una resolución al norte de 122 megapíxeles. Es una solución extrema para tareas muy exigentes como la animación de películas en 3D y el modelado de entornos o la edición de videos en 8K. Una de sus demostraciones durante el evento de Mac Pro incluyó mil pistas de audio cargadas en Logic Pro X. Este es un buen ejemplo del margen de rendimiento de esta nueva máquina que cuenta en su corazón con la CPU Intel Xeon con hasta 28 núcleos y un máximo de 1.5 terabytes de memoria.
Del nuevo monitor poco se puede decir hasta tenerlo cerca y probarlo, lo que más sorprende es que la peana cuesta 1.000 dólares y no sé si hará el café de la mañana por ese precio.
Razonablemente habrá que esperar a que se puedan probar las primeras unidades para saber hasta dónde ha llegado Apple y lo que tendremos que ahorrar este verano para hacernos con una de estas nuevas máquinas.
Y no os olvidéis que el conjunto de equipo y monitor costará lo que un coche utilitario, eso sí, correrá mucho más.
Personalmente, lo más positivo es que es la primera vez que Apple ha escuchado - a su manera - las críticas del mundo profesional y ha reconfigurado un equipo volviendo a una esencia que se había perdido ya hace más de10 años. Y para muestra os pongo la imagen del primer Power Mac G5 (año 2003) de donde vino todo lo bueno en equipos para trabajos profesionales y que Apple despreció durante muchos años.