Nos hacemos eco de este artículo del Blog de nuestra web hermana www.novaeducacion.com.
Es una situación que debemos evaluar y sacar conclusiones para nuestro desarrollo en las escuelas españolas.
El distrito unificado de escuelas de Los Ángeles en Estados Unidos, ha desestimado el gran plan "iPad para todos".
El gran plan para dar un iPad a cada alumno en el distrito escolar de Los Ángeles por valor de 1.300 millones de dólares, ha sido paralizado después de un informe del departamento de educación.
El acuerdo anunciado el pasado junio se ha encontrado con algunos problemas financieros y administrativos que han aconsejado su suspensión.
El director de la oficina de Tecnología de la Educación, puso de manifiesto que que se había destinado todo el énfasis en el ecosistema de Apple, sin tener en cuenta otras opciones menos caras y costosas que podían haber ahorrado mucho dinero. De esta manera se deberían haber incluido en el plan opciones para el uso de otras plataformas como los ChromeBook y dispositivos basado en Microsoft.
Desde diciembre se recortaron los recursos para este plan destinados solo a la plataforma Apple con su iPad, debido a una carga financiera abrumadora y a una planificación deficiente en la formación de adecuada a profesores. El resultado es que la política de implementación falló desde sus inicios y esto ha devenido en un cúmulo de problemas que se han agravado por el importe total del proyecto y su dimensión.
Esta deficiente planificación y la falta de un liderazgo claro en el distrito educativo de Los Ángeles se ha sumando a la excesiva dependencia en un solo fabricante como Apple, siendo esto el punto de fricción que determinado la cancelación del plan.
El problema del liderazgo también ha repercutido en la baja implementación de planes de adecuación y formación en las escuelas y no se ha consensuado una visión a largo plazo de cómo se deben integrar esta tecnologías y sus resultados.
El otro problema básico ha sido la financiación y el malentendido de los costes de adquisición de los productos Apple y sus descuentos por volumen, siendo la fase inicial de 30 millones de dólares que se incrementó hasta los 140 y no siendo suficiente para alcanzar unos precios adecuados, ya que Apple estimó que se debían alcanzar los 400 millones de dólares en iPads de Apple para poder obtener un mejor descuento.
Esto es un muestra de que lo primero que se debe acometer en una adecuación tecnológica y metodológica es la planificación de recursos y una visión del objetivo final que queremos alcanzar. Aparte de la selección del proveedor adecuado que nos guíe en la consecución de objetivos, no debemos olvidar de que un fabricante se debe a sus ventas y nos puede hacer cautivos de su tecnología impidiéndonos un desarrollo más enfocado a los cambios metodológicos y más enfocados a una relación meramente comercial en dónde lo que prima es el reporte de ventas, como parece que ha sucedido en este fracasado plan.
Siempre hemos alabado los productos de Apple y su visión de implementación en las escuelas, pero debemos evaluar otras alternativas, que en muchos casos pueden complementar nuestra oferta educativa sin tener que estar cautivos de un único ecosistema.
Desde Compolaser aconsejamos dedicar el mayor esfuerzo en ele análisis de necesidades y dejar para el último paso la decisión de plataformas y fabricantes, siendo esta la única manera de acercarnos al éxito en la implementación y cambio metodológico en nuestras escuelas.
Es una situación que debemos evaluar y sacar conclusiones para nuestro desarrollo en las escuelas españolas.
El distrito unificado de escuelas de Los Ángeles en Estados Unidos, ha desestimado el gran plan "iPad para todos".
El gran plan para dar un iPad a cada alumno en el distrito escolar de Los Ángeles por valor de 1.300 millones de dólares, ha sido paralizado después de un informe del departamento de educación.
El acuerdo anunciado el pasado junio se ha encontrado con algunos problemas financieros y administrativos que han aconsejado su suspensión.
El director de la oficina de Tecnología de la Educación, puso de manifiesto que que se había destinado todo el énfasis en el ecosistema de Apple, sin tener en cuenta otras opciones menos caras y costosas que podían haber ahorrado mucho dinero. De esta manera se deberían haber incluido en el plan opciones para el uso de otras plataformas como los ChromeBook y dispositivos basado en Microsoft.
Desde diciembre se recortaron los recursos para este plan destinados solo a la plataforma Apple con su iPad, debido a una carga financiera abrumadora y a una planificación deficiente en la formación de adecuada a profesores. El resultado es que la política de implementación falló desde sus inicios y esto ha devenido en un cúmulo de problemas que se han agravado por el importe total del proyecto y su dimensión.
Esta deficiente planificación y la falta de un liderazgo claro en el distrito educativo de Los Ángeles se ha sumando a la excesiva dependencia en un solo fabricante como Apple, siendo esto el punto de fricción que determinado la cancelación del plan.
El problema del liderazgo también ha repercutido en la baja implementación de planes de adecuación y formación en las escuelas y no se ha consensuado una visión a largo plazo de cómo se deben integrar esta tecnologías y sus resultados.
El otro problema básico ha sido la financiación y el malentendido de los costes de adquisición de los productos Apple y sus descuentos por volumen, siendo la fase inicial de 30 millones de dólares que se incrementó hasta los 140 y no siendo suficiente para alcanzar unos precios adecuados, ya que Apple estimó que se debían alcanzar los 400 millones de dólares en iPads de Apple para poder obtener un mejor descuento.
Esto es un muestra de que lo primero que se debe acometer en una adecuación tecnológica y metodológica es la planificación de recursos y una visión del objetivo final que queremos alcanzar. Aparte de la selección del proveedor adecuado que nos guíe en la consecución de objetivos, no debemos olvidar de que un fabricante se debe a sus ventas y nos puede hacer cautivos de su tecnología impidiéndonos un desarrollo más enfocado a los cambios metodológicos y más enfocados a una relación meramente comercial en dónde lo que prima es el reporte de ventas, como parece que ha sucedido en este fracasado plan.
Siempre hemos alabado los productos de Apple y su visión de implementación en las escuelas, pero debemos evaluar otras alternativas, que en muchos casos pueden complementar nuestra oferta educativa sin tener que estar cautivos de un único ecosistema.
Desde Compolaser aconsejamos dedicar el mayor esfuerzo en ele análisis de necesidades y dejar para el último paso la decisión de plataformas y fabricantes, siendo esta la única manera de acercarnos al éxito en la implementación y cambio metodológico en nuestras escuelas.